miércoles, 15 de octubre de 2008

El ángel de mi hermana


El ángel de mi hermana

Por Mariam Ludim Rosa Vélez

Es fuerte, robusto, guerrero, gigante, guardián, compañero. Sí, desempeña todas las funciones de la descripción de su puesto: ángel. Mas, éste es un ángel especial porque es el ángel de mi hermana y sus alas son multicolores.

Allí donde está recluida, en la habitación 6-B, mi hermana -cuya imaginación de poeta sobrepasa las atribulaciones físicas- nos relató este fin de semana que su ángel guardián tiene inmensas alas de muchos colores.

El ángel de mi hermana Sonia, a quien llamamos familiarmente Chiqui, es quien ahora toma su mano, en representación de todos los que quisiéramos estar cerca de ella, velando su dormir, celebrando su despertar, escuchando sus relatos de sueños de ángeles y sirenas pluricoloread@s, sintiendo su respirar, oyendo su voz…

El ángel de mi hermana con destellos del arco iris, representa la libertad en la que podemos navegar por nuestros pensamientos cuando nuestro cuerpo corruptible trata de vencer una voluntad férrea.

El ángel de mi hermana la arrulla con alabanzas en español, en inglés y hasta en lenguaje taíno... y los himnos se transforman en brillantes tonalidades que pintan su rostro de paz, mientras susurra la melodía.

El ángel de mi hermana transforma su ventana de Virginia en un prisma de colores del que emergen árboles puertorriqueños, flores tropicales, pajaritos caribeños, un coquí en una amapola rosa y un río dorado que bordea su natal Aguada.

El ángel de mi hermana la arropa con sus preciosas alas policrómaticas. Así la hace sentir segura, tranquila… con su vista en esos cálidos tornasoles que con ternura acarician su ser.

“Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, para que te guarden en todos tus caminos”. Salmos 91:11

Y a mi hermana le envío un ángel fuerte, guerrero, robusto, gigante y con majestuosas alas multicolores para que la guarde en su camino.